Hola, me llamo Adrián Gonzalo. He estudiado gestión administrativa en el IES Federico García Lorca y he tenido la oportunidad de vivir el proyecto KA102, que me permitió realizar mis prácticas en el extranjero, concretamente en la tienda Oxfam situada en la calle Broad St. de Oxford.
Todo esto empezó cuando mi profesora de Informática, Elisa Castillo, me informó de la posibilidad de poder vivir esta experiencia. Y desde ese momento no dudé.
Terminó el primer curso y llegó el momento de solicitar el proyecto, realizando las entrevistas pertinentes (personal y de idioma).
Cuando me comunicaron que había sido elegido tanto para Reino Unido como para Italia no me lo podía creer. Y ahora, solo tocaba esperar a que llegase el día de salir.
Me acuerdo de lo nervioso que estaba ese día, porque siempre es difícil dejar a tus seres queridos atrás. Una vez allí el profesor acompañante Jesús, nos ayudó para sacar la tarjeta de transporte y nos acompañó a los alojamientos de cada uno de mis compañeros.
Las 3 primeras semanas tuvimos la oportunidad de ir a una academia que nos permitió conocer gente de diferentes países y de esta forma hizo más fácil nuestra integración en la ciudad.
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De Oxford diría que es una ciudad que te atrapa, ya que cuenta con numerosos colleges y por tanto hay mucha gente joven. Mención aparte es su historia y monumentos, ya que puedes ver sitios como la torre de Carfax, o el college Christ Church lugar donde los directores de Harry Potter tomaron como punto de referencia y recrearon para varios escenarios de las películas.
En cuanto a la empresa y el alojamiento no tengo más que buenas palabras ya que me trataron desde el primer día como uno más. En la empresa conocí a multitud de personas de diferentes países que me permitió conocer un poco de diversas culturas. En la empresa realizaba una multitud de actividades (hacer la caja, reponer productos, proceso gift aid, operaciones financieras diarias y semanales, etc…).
Además tuve la suerte de poder cambiar hasta en 4 ocasiones de tiendas lo que me permitió ver las diferencias entre unas y otras.
Para acabar quiero dar las gracias a los profesores, al Federico García Lorca, por dejarme vivir esta experiencia. Y por supuesto, a mis compañeros Lorena, Javier y Miguel Ángel sin los cuales no hubiese sido igual esta experiencia.
¡VIVA LA VIDA ERASMUS!