Michelle Padilla- Erasmus en Dublín. «La experiencia de mis sueños».

Hola, soy Michelle Padilla. Soy de Albacete y realice mis estudios en el IES Federico García Lorca, un ciclo de  grado medio de Actividades Comerciales específicamente.

Desde chiquita he amado el inglés, incluso cuando llegue de Venezuela (nací allí), mis tíos me regalaron la experiencia de poderme ir a Londres una temporada con ellos para mejorar mi inglés y desde ahí, creo que jamás había tenido tanto amor a un idioma, por lo que volviendo al tema, empecé a estudiar en el Federico un ciclo de grado medio y en el primer año empecé a ver anuncios sobre un tal “erasmus +”.

Yo como siempre, busqué, me informe, pregunté a todos mis profesores, ya tanto que hasta mi tiktok siempre solo era de videos de experiencias erasmus+, y me dije «tengo que irme», es que no había ni terminado la segunda evaluación del primer año de grado medio y ya yo estaba preguntando qué y cuándo eran las pruebas, jajaja.

En el alojamiento con mis compañeros

Cuando ya pudo llegar las fechas de que finalmente podíamos aplicar para el erasmus, no paraba de preguntarle a mi tutor cuando podía ver a Elisa y a Jesús, los coordinadores, y me hacía muchísima ilusión saber que podría realizar mis prácticas en otro país, y más en uno que tenia mi idioma favorito de lengua principal.

Apliqué, realicé mi video de presentación y pasé la primera prueba. Ahora venía la prueba de idiomas, la cual hice un diálogo para presentarme que jamás usé, solo me dejé llevar y empecé hablar inglés como creo que jamás había hablado en mis 21 años, pero fue lo mejor que pude hacer porque la profesora quedó encantada, o eso creo jajaja. Y pues, para culminar, hice la prueba de madurez, la cual con mucho miedo me presenté pero siempre siendo yo.

Y de eso se trata, de tener ganas de irte, de que te vean motivado, pero siempre siendo tú. Para finalizar, os diré que me seleccionaron, quedé en primer puesto y yo no podía creérmelo, ¡al fin comenzaba la cuenta regresiva para la experiencia de mi vida! porque eso fue, la mejor experiencia del mundo.

Llegó el día, nos fuimos a Dublín, me despedí de mis padres, empezó mi

aventura con 4 chicos más, de los que solo conocía a un compañero de clases que era como mi hermano y otros tres que no había visto ni conocía de nada, y no sabía que se volverían tan indispensables en mi vida y que lloraría tanto al tener que decirles adiós. Creo que desde el momento en el que aterricé sabía cómo sería esta experiencia, una locura, pero de las buenas, de las que tienes que vivir para crecer, para contar luego mil historias y para crear miles de recuerdos.

Los 5 erasmus del IES en Dublín

¿Qué puedo decir de mi tienda? Jamás en la vida volveré a coincidir con un «workteam» como en Oxfam Rathmines. Tuve las mejores prácticas que alguien puede desear, me iba feliz desde temprano, y volvía cansadísima pero sabiendo que cada día me estaba yendo mejor. Hice unas amistades increíbles que voy a llevarme para toda la vida. Mis encargadas eran unos amores, mis compañeros aun más, destacando a Flore, quien fue mi mejor amiga desde el día uno, y una persona que me llevo para siempre, porque eso es esta experiencia, conocer gente, y vivir el día a día como no lo harías normalmente.

Con Flore, mi gran amiga.

En la tienda de Rathmines montando el escaparate.

Dublín es una ciudad hermosa, aunque tiene un clima un poco raro, que absolutamente nadie entiende, sé que lo voy a extrañar mucho porque es lo que hace la ciudad tan única y especial. Aparte de su gente, que son tan amables, hablando de irlandeses, ya no hablando de los de miles nacionalidades que conocí y las cuarenta mil amistades que hice de gente de todo el mundo, desde mis «roomates», que eran de todos lados pues cada dos semanas llegaba gente nueva, hasta la gente que conocía de fiesta en mi sitio preferido “Dicey´s”, las locuras, momentos y personas que me regaló ese sitio que me llevo para siempre.

Fiesta en Dublín

Creo que Dublín es la ciudad perfecta para irte de Erasmus por su ocio nocturno, su gente, su cultura, su naturaleza, es que desde que sales de casa quieres hacerle foto a todo de lo hermoso que es. Una ciudad muy grande, sí, pero vale la pena recorrérsela toda. Y Alba, mi compañera del instituto y yo no nos quedamos atrás, fuimos a cada sitio lindo, y cada vez que llegábamos decíamos, «valieron las dos horas en tren, aquí estamos y es más hermoso que por foto», que por cierto nos hicimos unas miles de fotos en cada sitio al que íbamos jajaja.

Con Alba, mi compañera de Erasmus

Alba, fue la persona que más destaco de mi experiencia. Conocí junto a ella sitios increíbles, viví momentos increíbles, nos fuimos de fiesta como nunca me había ido en mi vida, y guardamos historias que nos vamos a llevar para siempre. Es la mejor compañera de habitación que puedes encontrarte en la vida. Aparte de todo lo bueno de esta experiencia, las amistades que haces aquí y las personas que conoces no las olvidarás en la vida.

Viaje a Galway, solo por Ed Sheeran y su canción Galway Girl.  Pero al llegar dije: “¿cómo no vine antes?». Es una fantasía de ciudad, amé estar tres horas en un tren viendo por la ventana los paisajes tan hermosos que tiene Irlanda. Es que, de verdad, aparte de lo un poco costosa que puede llegar a ser, vale totalmente la pena.

Mi experiencia en sí, como resumen, fue más especial, hermosa e increíble de lo que imaginé. Y ojalá volviera a vivirla mil veces más, porque siento que me faltó hasta tiempo. Tres meses se me quedaron en un pestañeo de ojos. Pero los suficientes para darme cuenta de que crecí en todos los aspectos de mi vida y que eso ¡voy agradecerlo para siempre!

Podría escribir mil párrafos más, pero hay que dejar espacio para algunas fotos jajaja.

Gracias por todo Erasmus +.